BAQUIANA – Año XXV / Nº 129 – 130 / Enero – Junio 2024 (Entrevista II)

CONVERSACIÓN CON UVA DE ARAGÓN, UNA ESCRITORA MULTIFACÉTICA Y HABANERA ETERNA

 

por

 

Maricel Mayor Marsán

 

Uva de Aragón 581 X 412

 


Nació en La Habana, Cuba (1944). Es poeta, ensayista, novelista, profesora y periodista. Ha publicado más de una docena de libros y mantenido una amplia producción periodística. Dos de sus novelas, traducidas al inglés, se enseñan en cursos universitarios. Una adaptación de su novela Memoria del Silencio ha sido llevada al teatro en Chile, España, Estados Unidos y Venezuela. Varios de sus cuentos, poemas, ensayos, obras de teatro y artículos aparecen en múltiples antologías. Ha sido ganadora de diversos premios literarios. Tiene un doctorado en Literatura Española e Hispanoamericana de la Universidad de Miami. Fue subdirectora del Instituto de Investigaciones Cubanas (CRI) y profesora de la Universidad Internacional de la Florida (FIU), hasta su jubilación en 2011. En 2010 inauguró su blog Habanera soy https://uvadearagon.wordpress.com. En la actualidad es miembro correspondiente de la Academia Norteamericana de la Lengua Española (ANLE).


 

“La escritora Uva de Aragón creció en una familia de la burguesía intelectual de La Habana. Tras la revolución de 1959 se exilió con su familia a Estados Unidos. A sus 79 años visita Madrid, el Madrid de sus raíces genealógicas y al que ha estado siempre apegada, para la presentación única de MEMORIA DEL SILENCIO (el sábado en el teatro MAYKO), una obra basada en su novela del mismo título sobre dos gemelas cubanas que se reencuentran décadas después de separarse por el hachazo político.”

Pablo de Llano Neira
EL PAÍS (Entrevista)
19 de octubre de 2023
Madrid, España.

 

“Desde que abrió su blog de la Internet se declaró a sí misma con el título: ¨Habanera soy¨. Ahora en sus memorias, se transpira ese orgullo de ser cubana, a pesar de haber vivido la mayor parte de su vida en Estados Unidos.  Nunca perdió el encanto de La Habana, aunque forzada al exilio de muy joven, ni la satisfacción de pertenecer a una familia que le propició un legado cultural y patriótico. Esto la inspiró a destacarse por sus propios logros en tierra nueva. Así es en realidad Uva de Aragón.”

Olga Connor
ESPECIAL/EL NUEVO HERALD (Artes y Letras)
27 de marzo de 2022
Miami, Florida, EE.UU.

MMM – A pesar de que saliste de Cuba con tu familia en 1959 –al comienzo del llamado exilio histórico– la presencia de la Isla en tu quehacer y pensar diario es una constante. ¿A qué se debe esta afinidad electiva y afectiva cuando la mayoría de los exiliados de tu generación y otras generaciones posteriores tienden a identificarse poco a poco con el país de acogida, como en el caso de los cubanoamericanos, y a su vez suelen distanciarse en esencia del país de procedencia con el transcurrir de los años?

UDA – Quizás se deba a que me fui poco tiempo después del triunfo de la Revolución, en julio de 1959, y aunque tuvimos nuestra cuota de persecución y angustia, los recuerdos de mi infancia y primera adolescencia son de una Cuba, y especialmente, una Habana deslumbrante, pese al trasfondo de violencia. Por mucho tiempo pensábamos que íbamos a regresar, de modo que veía la estancia en Estados Unidos como algo temporal, no permanente como ha resultado.  También mis antepasados contribuyeron a la República en diversas ramas. Incluso tengo un tío abuelo y un tatarabuelo que pelearon en las guerras de independencia. En fin, me atan raíces muy profundas a Cuba.

Foto 1 - Alfonso, Sara, Alberto, Pepe HC, Carlos MS, Mercedes Galt,Uva HC y Uva de Aragón La Habana Dic 1957 - Ajustada

De pie: sus tíos Alfonso, Sara, Alberto y Pepe Hernández-Catá. Sentados: su padrastro Carlos Márquez Sterling, su abuela Mercedes Galt, viuda de Alfonso Hernández-Catá (Mamá Lila) y su madre Uva Hernández-Catá. Sentada en el suelo Uva de Aragón. (La Habana, Cuba, circa 1957)

 

MMM – Es evidente el orgullo que sientes por tu historia familiar. ¿Cuándo comenzaste a estudiar a fondo la obra de tu abuelo Alfonso Hernández Catá? Me podrías elaborar sobre el libro que le dedicaste y su participación en la vida cultural cubana de principios y mediados del siglo XX.

UDA – Aunque había leído todos los libros de mi abuelo el verano de mis trece años, cuando comencé mis estudios graduados, releí sus cuentos y novelas con unas herramientas críticas de la que carecía anteriormente, y confirmé la calidad de su obra.  Cada vez que tenía oportunidad en un curso, escribía sobre él, trabajos que se convirtieron en semillas de los capítulos de mi tesis, publicada años después por la Universidad Pontificia de Salamanca. / Hijo de una criolla de familia independentista y un militar español, la vida de Hernández-Catá basculó siempre entre Cuba y España. Fue concebido y creció en Santiago de Cuba, pero nació en el pueblo de su padre en Salamanca. Entró en el cuerpo diplomático en 1908 y vivió prácticamente el resto de su vida en el extranjero, especialmente en España, donde publicó casi la totalidad de su obra, traducida a varios idiomas. En ese Madrid de la Edad de Plata de la literatura española se codeó con escritores como José Ortega y Gasset, Ramón Pérez de Ayala, los hermanos Machado, Rafael Alberti, Federico García Lorca, y Benito Pérez Galdós, quien lo ayudó a publicar en revistas de Madrid. Con su cuñado Alberto Insúa escribió varias obras de teatro y con el Maestro Jacinto Guerrero una zarzuela, algunas de mucho éxito. Se carteaba con intelectuales en la Isla como José Antonio Ramos, Manuel Navarro Luna, Emilio Ballagas y muchos más. Mandaba sus libros a los colegas cubanos. Leía y muchas veces escribía sobre obras de autores cubanos. Les sirvió de puente. Por ejemplo, es él quien le hace llegar Sóngoro Cosongo de Nicolás Guillén a Miguel de Unamuno, cuya elogiosa carta el poeta cubano aparece en ediciones posteriores.  AHC publicaba en las mejores revistas de la Isla como Social y Revista Bimestre Cubana. Viajaba a Cuba cada vez que era posible. Daba conferencias. Se sentía profundamente cubano, al punto de mentir y decirse nacido en Santiago. Aunque su obra tiene un aliento universal, dedicó muchas páginas a Cuba, entre ellos sus libros Mitología de Martí, y Un cementerio en Las Antillas.  Como sabes, murió en un accidente de aviación en Brasil, donde era Embajador, a los 54 años. En su tumba en el Cementerio de Colón se reproduce el ex libris que utilizaba, con un arquero apuntando hacia arriba y la leyenda “Apasionadamente hacia la muerte”.

PORTADA - Cuentos de Alfonso Hernández Cata 631 X 869

 

MMM – ¿Cómo influyó en tu vida y posterior carrera literaria la figura del escritor y periodista Carlos Márquez Sterling?

UDA – He sido muy afortunada porque he tenido dos grandes padres. El primero, el de la sangre, Ernesto R. de Aragón, médico, inculcó en mí el amor a las reuniones familiares, los viajes, la búsqueda de la excelencia, la puntualidad y un sentido del deber patológico. Su muerte cuando yo tenía nueve años me produjo una honda herida. Tres años después mi madre se casó con Carlos Márquez Sterling, político e intelectual, y un gran segundo padre para mis hermanas y para mí. Carlos por muchos años guio mis lecturas y estimuló desde jovencita mi vocación por la literatura. Incluso fue él quien en circunstancias muy difíciles sacó de Cuba las prosas poéticas escritas en mi adolescencia que luego formarían parte de mi primer libro. Era un hombre obsesionado por los destinos de Cuba. Conocía su historia como pocos. Tuve el privilegio de ayudarlo en la Biblioteca del Congreso con la investigación para terminar su Historia de Cuba, publicada en 1963. Carlos es conocido principalmente por su actuación como presidente de la Asamblea Constituyente de 1940, pero en mi opinión el momento más bello de su carrera fue su intento en 1958 de derrotar tanto a Batista como a Castro por la vía electoral. Perdió pero no se amargó. Siempre supo separar las esencias de la Patria de la Revolución. Podía detestar la segunda pero amaba apasionadamente la primera. Y ese amor me lo trasmitió. Era un hombre renacentista, que sabía por igual de cine que de literatura, de pelota que de historia. Era recio para el dolor. Con gestos muy tiernos y un gran sentido ético de la política y la vida. Sin duda mis dos padres han sido una gran influencia en mí.

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Rosie Inguanzo, Uva de Aragón, Carlos Alberto Montaner, Teresa María Rojas. Después de la lectura dramatizada de textos de No puedo más y otros cuentos. (Universidad Internacional de la Florida, Miami, 1989).

 

MMM – Aparte de los miembros destacados de tu familia en el campo de las letras, puedes citar algunos escritores cubanos, dentro o fuera de Cuba, que admiras o que han marcado de alguna forma tu escritura?

UDA – Hay muchos escritores cubanos que admiro como José Martí y Gertrudis Gómez de Avellaneda en el Siglo XIX, y en el XX los poetas Eugenio Florit, Dulce María Loynaz y Gastón Baquero, y los multifacéticos Carlos Alberto Montaner, Reinaldo Arenas, Hilda Perera y Guillermo Cabrera Infante, para mencionar solo algunos entre los ya fallecidos. No creo, sin embargo, que ningún escritor cubano haya influido en mi obra, con excepción tal vez de Martí en mis prosas muy tempranas. Lo que sí he tenido son “maestros” cubanos, verdaderos mentores en mi etapa de formación, como Octavio R. Costa y principalmente José Ignacio Rasco.

Orlando, Rita, Rasco, Uva, Reinaldo Arenas (New Jersey, 1982) 536X832

Orlando Rodríguez Sardiñas (Rossardi), Rita Geada, José Ignacio Rasco, Uva de Aragón, y Reinaldo Arenas. (Rutgers University, New Jersey, 1982).

 

MMM – Hasta la fecha has trabajado varios géneros literarios –poesía, cuento, ensayo, artículos, novela y teatro– ¿Cómo ha sido la transferencia de uno a otro?

UDA – Es curioso. De alguna forma cuando he tenido una idea, a veces me ronda por años, y otras siento urgencia por expresarla, pero siempre de alguna forma he sabido cuál es el mejor género para darle forma. Por varios años mi narrativa se limitó a los cuentos, porque me era imposible encontrar tiempo para escribir una novela. Pero en los 90, un querido amigo, Fernando Jover, me insistió que debía escribir una novela. En 1999 tuve la oportunidad de disfrutar de un semestre de sabático que dediqué a terminar “Memoria del silencio”, cuyos primeros capítulos había escrito un par de años antes.

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Fernando Jover, Octavio R. Costa, Uva de Aragón, y Juan Manuel Salvat. Celebrando la publicación del libro El caimán ante el espejo. (Coral Gables, Florida 1993).

 

MMM – De los libros de poesía que has publicado hasta el presente, ¿Cuál es tu libro de poesía preferido? ¿Y en narrativa?

UDA – De poesía “Los nombres del amor”, escrito siendo una mujer en plenitud. En narrativa, si nos limitamos a los cuentos y novelas “Memoria del silencio”, pero si incluimos el género de memoria, quizás “El reino de la infancia.”  Los libros son como hijos. A todos se le quiere igual, aunque de forma distinta.

El reino de la infancia . Portada 564H Los nombres del amor - Portada 344 X 564 Memoria del silencio 2023 portada 377 X 564

 

MMM – Es curioso que de todas las etapas y experiencias que has vivido, decidiste escribir el libro El reino de la infancia acerca de una etapa temprana de tu vida y no así de otras. ¿Por qué?

UDA – Quizás porque muchos aspectos de mi vida los he ido revelando en otras obras, especialmente en el periodismo. En mis columnas he llorado a mis muertos (crónicas recogidas en “Morir de exilio”), he reflexionado al casarse mi hija, al nacer mis nietos, al jubilarme de FIU, al cumplir años. También mis viajes han sido motivo de mis artículos.  Por otra parte, esos primeros 15 años de mi vida, desde el nacimiento hasta el día que me fui de Cuba, son la piedra angular de la mujer, de casi ochenta años, que soy hoy. Con la llegada de la Revolución se truncó el plan de vida que tenía muy claro a esa edad, de estudiar periodismo y Filosofía y Letras. Me robaron el futuro y tuve que reinventar otros caminos.  El pasado me lo llevé conmigo. Escribí El reino de la infancia para salvar del olvido una etapa de mi vida y de la del país.

Morir de Exilio - Portada 564H

 

MMM – ¿En qué idioma te sientes más cómoda a la hora de escribir tu obra de ficción, en inglés o en español?

UDA – Sin duda en español. Cuando tenía veintipico de años, decidí que iba a escribir en español, porque vengo de una familia de escritores españoles y cubanos, y porque hay una relación muy íntima entre sentir como cubana y escribir en español. No en balde idioma e identidad comparten la misma raíz. Para dominar mejor el español, cuando nos mudamos a Miami — los primeros 20 años de exilio los viví en “el norte”, rodeada de inglés y nieves—comencé a estudiar hasta completar un doctorado en literatura española y latinoamericana. Me cambió la vida, no sólo porque me abrió otras posibilidades laborales, sino porque amplió mi cultura y me ayudó a escribir mejor.

Memory of silence with Jeffrey Barnett (Books and Books - March, 2015) 600X898 The Memory of Silence - Portada 438X600

Presentación de la edición bilingüe de Memoria del silencio/The Memory of Silence. Uva de Aragón y Jeffry C. Barnett, traductor de la novela, en la librería Books and Books. (Coral Gables, 2015)

 

MMM – ¿Cómo surge la idea de la novela Memoria del silencio y su posterior traducción al inglés? ¿Cuál ha sido la repercusión que la misma ha tenido de parte del público lector, tanto en español como en inglés?

UDA – La novela tiene un antecedente en el cuento “Round Trip” publicado en 1989, en el que una mujer toma el lugar de la hermana que ha muerto para ir a Cuba a cuidar a la madre ciega. Hace años que pienso que algunas nos fuimos y otros se quedaron por circunstancias de la vida, pero que son existencias intercambiables, que alguien ha vivido en la Isla la vida que yo pude tener…en fin, comencé a escribir la novela con esa idea y el interés de ponerme en la piel de una mujer más o menos de mi edad viviendo en Cuba, para poder entender al “otro”, o en este caso a “la otra”, Sin duda es el libro mío que ha tenido mayor repercusión. El profesor Jeffrey C. Barnett, de Washington and Lee University, la enseñó un semestre y luego la tradujo. La edición bilingüe le abrió las puertas del mundo académico norteamericano. La enseñan en varias universidades. Algunas me han invitado a sus recintos y muchas veces comparto con estudiantes por “zoom”. La directora de teatro cubana venezolana Virginia Aponte la llevó al teatro. En el estreno en Caracas en 2013 fue una gran emoción ver a mis personajes cobrar vida en el escenario.  Escribí la novela en 1999, hace 25 años, y la primera edición es de 2002 y en estos meses se han publicado nuevas ediciones en español y en inglés. Ha ganado un premio como novela histórica, aunque al escribirla no la veía como tal,

 

MMM – A propósito de la adaptación de la novela Memoria del silencio al teatro, ¿me podrías comentar acerca de su más reciente puesta en escena en Madrid durante el otoño de 2023.

UDA – Fue una gran emoción ver esta historia cubana representada por actores venezolanos en una sala de teatro en Madrid. Hay una gran satisfacción cuando uno comprueba que ha escrito algo que tiene un aliento universal. Tuve la suerte de poder compartir una noche tan especial con una de mis hijas, mi nieto menor y queridos amigos. Pero lo que más agradezco siempre es la gente que no conozco y asisten al lanzamiento de un libro o una puesta en escena por amor a la literatura, y luego se me acercan con sus comentarios.

 

MMM – ¿Cómo has podido sobrellevar a lo largo de tu vida laboral tus múltiples obligaciones como madre, abuela, profesora, escritora, periodista (columnista de El Nuevo Herald y del Diario Las Américas, así como colaboradora asidua de Radio Martí), editora y directora asociada del Instituto de Investigaciones Cubanas de la Universidad Internacional de la Florida (FIU)?

UDA – Con una fórmula muy fácil. Tener muy claras mis prioridades y hacer una cosa atrás de otra y no todas a la vez. Es decir, si iba a un juego de una de mis hijas, lo disfrutaba a plenitud y todo lo demás esperaba. Si dedicaba las tardes de domingo a escribir mi columna, la familia sabía que no se me interrumpía. Quizás era más fácil entonces porque no había celulares…

 

MMM – Eres una mujer incansable, por lo que me gustaría saber sobre tus nuevos proyectos o planes futuros. ¿Tienes algún libro en prensa?

UDA – No tengo nada en prensa pero sí una novela inédita de la que espero poder dar noticias este año. En julio si Dios quiere cumplo 80 años y pienso que al entrar en lo que sin duda será la última década de vida productiva, debo también revisar y reeditar libros que están agotados, y textos dispersos, como por ejemplo mis cuentos.

 

Alfonso Hernández Cata - 482H Crónicas de la República de Cuba - 482H El caimán ante el espejo - 482H El crimen de Biltmore Way - 482H El Mundo y mi Cuba en el Diario - 332X482

 

MMM – A mediados de febrero de 2024, el Instituto de Investigaciones Cubanas de la Universidad de la Florida (FIU) te ha dedicado su congreso bianual, en un homenaje honroso por tu trabajo en dicho centro y la totalidad de tu obra. ¿Cuáles son tus impresiones al respecto?

UDA – Me ha honrado mucho. Ha sido interesante que en el panel sobre “Memoria del silencio”, organizado antes de saberse que me iban a dedicar la conferencia, han participado dos americanos, un ruso, una española y por insistencia mía, una cubana. Aunque me ha alegrado que este honor venga del Cuban Research Institute, donde me desempeñé varios años como subdirectora, y que sea en el marco de unas conferencias que yo solía organizar, agradezco que no hayan hecho énfasis en el aspecto académico de mi trayectoria, sino en mi obra literaria. Muchas personas lo merecerían tanto o más que yo, de modo que lo he recibido humildemente en nombre de toda mi generación.

UVA DE ARAGON con la placa recibida en la XIV conferencia del CRI Feb 15 2023 472X630 Programa del XIV Congreso del CRI - 491X630

 

MMM – ¿Cómo quisieras que tu legado literario prevaleciera en un futuro? ¿Cómo te gustaría ser recordada?

UDA – Me gustaría ser recordada como una escritora cubana, hispanoamericana, universal. Una mujer que amó la vida y la literatura e intentó darles a ambas lo mejor de sí misma.  

 

Foto 2 - comferemcoa sobre ahc municipio de Santiago de Cuba 1975 - 389H Foto 3 - Entresemáforos, Salvat, Valdés, Cecilia, Uva, Rasco Miami 1980 - 389H Uva entrevistando a Vargas Llosa - 389X631

De izquierda a derecha: (1) Su primera conferencia sobre Alfonso Hernández Catá, con Luis Casero y Gerardo Abascal. Municipio de Santiago de Cuba en el exilio (Miami,1975).  (2) Presentación del poemario Entresemáforos, poemas escritos en ruta. Juan Manuel Salvat (editor). Juan Valdés (impresor), Cecilia Guerra (diseñadora), Uva de Aragón, y José Ignacio Rasco (prologuista). Galería Meeting Point, (Coral Gables, 1981).  (3) Entrevistando a Mario Vargas Llosa para “FIU in View”, (Miami, 1990).

 

 

 

 

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